jueves, 8 de noviembre de 2007

Marchando otra más de hipocresía sindical

Para quienes tengan curiosidad o aún no se hayan dado cuenta de la lacra sindical que padecemos, no duden en leer la siguiente noticia sobre la política laboral de CCOO.

7 comentarios:

Fin de los Tiempos dijo...

Se han fijado que pese a que los salarios son más bajos, el paro aumenta y la desigualdad social crece, los sindicatos no han abierto la boca contra el Gobierno, ni manifestaciones ni huelgas?

Sempietnos dijo...

Los sindicatos son una lacra heredada de la Trnasición,que no aporta nada,salvo un refugio donde engordar el buche y el bolsillo, a una caterva de ineptos y vividores.

Butzer dijo...

Que los sindicatos deberían ser más independientes, es algo que creo que todos tenemos claro. ¿Pero qué queda independiente ya?

El Cerrajero dijo...

Al menos deberían ser claros, dejar de llamarse sindicatos, que confunde, y usar un nombre más descriptivo y adecuado, como pesebristas o parásitos.

Maya dijo...

Que vergüenza de sindicatos, desde luego. Pobre mujer, 15 años afiliada para que la traten así.

ludwig dijo...

¡Vaya con vuestro doble rasero!.

El hecho de que se despide a una trabajadora ,por unos motivos discutibles, que seguramente le sea facil encontrar trabajo,porque ha trabajo de sobra para empleadas de limpieza ,para vosotros es un escándalo. En cambio seguramente os parece bién que los obispos puedan despedir a un profesor de religión por conducta moral sospechosa ,e incluso se permiten contratar a detectives privados para vigilar su vida íntima .

Sigurd dijo...

Ludwig, le pueden a usted el ímpetu y los prejuicios.

Un sindicato, ente que defiende a los trabajadores y que está en contra de las contratas, le hace la vida imposible a una señora para que se vaya y contratarla de manera que le salga más económica mediante un acción fraudulenta legalmente y a la vez le niega un derecho, asistencia letrada gratuita, que tiene adquirido como afiliada.

La actitud del Sindicato no es "discutible". Y si a usted le hiciera lo mismo una multinacional no diría que su despido es "discutible", sino que echaría pestes del neoliberalismo salvaje, y su sindicato se quejaría de lo desprotegidos que están los trabajadores ante estos fraudes.

Ya me dirá usted donde encuentra el símil entre esto y el Convenio Iglesa-Estado que regula el asunto que usted menta y que el Tribunal Constitucional ha considerado perfectamente constitucional. Supongo que le parecerá un matiz irrelevante, pero la Iglesia no despide, sencillamente no renueva el contrato. La otra señora llevaba 15 años trabajando, y la razón de su despido no es la falta de perfil idóneo (que le puede gustar más o menos pero es decisión de la Iglesia) sino ahorrarse unos duros a costa de los derechos de la trabajadora.

¡Autofinanciación para los sindicatos ya!